Excelencia en Comunicaciones y Tecnología está celebrando los 30 años de vida y para hablar de su trayectoria, logros y visión de negocio de cara al futuro conversamos con Jorge Castañeda, histórico presidente de la compañía.
¿Qué primeras reflexiones puede entregarnos acerca de la evolución tecnológica y cómo ha impactado en usted y en Excelencia?
-En estos 30 años el avance tecnológico ha sido y es avasallante. En lo personal, agradezco a la vida haber tenido la oportunidad de conocer una tecnología como la internet, los correos electrónicos, los WhatsApp, las redes sociales; pero, como contrapartida, mucha de esa información que vemos en internet también supone una enfermedad que daña a las personas y a las empresas. Es como todo en la vida, tienes cosas buenas y malas.
En cuanto a Excelencia, debo decir con mucho orgullo que seguimos haciendo negocios el mismo campo donde empezamos hace más de 30 años y que es la venta de equipamiento a nivel Broadcast para nuestros clientes. Pero eso no es todo, hace 13 años decidimos abrir una parte de Gobierno para atender las necesidades inherentes a los tribunales y la actividad judicial, a partir de la cual hemos desarrollado un software para la administración y grabación en las salas de juicios orales con tecnología 100% mexicana diseñada y programada por los ingenieros de nuestra empresa. En todo este tiempo, con esa tecnología, hemos instalado más de 650 salas de juicios orales en prácticamente toda la República Mexicana.
Por otro lado, también hemos tenido la oportunidad de desarrollar un producto, con un socio tecnológico en México, para implementar los procesos administrativos y legales internos de la rama judicial en Colombia. Es un proyecto muy interesante que nos tiene ahora ocupados para poder exportar esta tecnología a dos países sudamericanos. Esto es lo viene pasando en los últimos dos o tres años.
¿Cómo vienen desarrollándose las operaciones en el mercado broadcast?
-En la parte de Broadcast seguimos adelante con marcas reconocidas. Sabemos que las marcas que van y vienen porque así sucede con los distribuidores; si no alcanzamos los parámetros pretendidos, las fábricas buscan otras empresas. Lo mismo pasa cuando se las quitan a otros y nos vienen a buscar a nosotros. Esto funciona así en todas partes del mundo a menudo se da un intercambio de marcas y de distribución.
Yendo a las operaciones, debo decir que el año pasado tuvimos la oportunidad de hacer una importante integración para Mediapro en México. Ellos decidieron montar un centro de producción para trabajar con Fox Sports y fuimos favorecidos para introducir al proyecto mucho equipamiento, con productos de nuestras marcas. Hemos sido responsables de la integración, implementación, cableado y puesta en marcha del 80% de las instalaciones. Para nosotros es un hito, especialmente porque lo logramos hacer en siete meses. Fue un reto muy fuerte y con muchísimo orgullo terminamos muy favorablemente; y obviamente, la gente de Mediapro quedó muy contenta con nosotros.
Por otra parte, también tuvimos la oportunidad de vender a Televisa bastante equipamiento para el Mundial de Qatar, con productos de las empresas con las que venimos trabajando desde hace mucho tiempo.
¿Cuáles son los retos a futuro a los que se enfrenta Excelencia?
-Ahorita, el reto es estabilizarnos como empresa nuevamente. La salida de Marco Rabadán nos crea un vacío importante porque ha trabajado con nosotros 18 años. Es joven capaz, inteligente y trabajador; entonces, estamos en búsqueda de un director comercial. Nuestra misión es seguir al futuro con las tecnologías de hoy en día, en especial con las operaciones en la nube y la Inteligencia Artificial. De todas maneras, todos sabemos que los equipos que se tienen que vender para las estaciones de televisión y para unidades móviles tienen que seguir siendo switchers de producción, servidores, monitores, cámaras y tripés, entre otros, puesto que son productos que tardarán en desaparecer en forma definitiva. En definitiva, el desafío pasa por el origen y procesamiento de los contenidos para su almacenamiento o modificación de la mano de la nube y la inteligencia artificial.
¿Cuál es su visión respecto avances como la tecnología 4K o los procesos de automatización que vienen incorporando las empresas productoras de contenidos?
– Si tú ves en todos los países latinos, la cuestión del 4K todavía está en pañales. Todo el mundo habla del 4K y de sus pantallas, pero no es una tecnología que se haya masificado. Sin ir más lejos, yo vivo en San Antonio (Texas) y AT&T / DirecTV tengo solamente dos canales de 4K y con una programación muy limitada. Por lo tanto, debo decir que el HD sigue dominando definitivamente.
Por otra parte, hay empresas como SineMedia, Ateme o Telestream -por mencionar algunas- que están tratando de automatizar los procesos de flujos y optimización de contenidos mediante softwares muy sofisticados. Tal es así que, para entenderlos exige estar muy enfocados para ser capaces de poder llevarlos a cabo en una instalación. Y definitivamente eso lo que hay que hacer, pero salvaguardando a las personas porque, lastimosamente, muchas empresas quieren quitar gente y que todo sea automatizado.
Con su experiencia y trayectoria, ¿qué mensaje dejaría para los amigos que ha cosechado en la industria a lo largo de todos estos años?
-Tengo buenos y malos amigos, como todos en esta industria y en cualquier otra. De todas maneras, creo que son más los buenos. Lo que les diría a todos ellos es que hay que estar preparados tecnológicamente, siempre. Entender acerca de la importancia de saber escuchar a las personas que están calificadas, técnica y operativamente en las nuevas corrientes tecnológicas y aprender de ellos. Nunca deben dejar de aprender. Nuestro papel, como vendedores de tecnología, es precisamente visitar a nuestros clientes y platicar con ellos acerca de todas estas nuevas tecnologías. Presentarles algo que no hayan tenido tiempo de ver en algún lugar, pero siempre atentos para escuchar cuáles son sus necesidades y ver en qué podemos prestar nuestra ayuda. Esa es mi filosofía desde hace muchísimos años.
